Tecnología de Plasma

¿Qué es el plasma?

Tecnología del plasma: una herramienta avanzada con aplicaciones versátiles

Cuando se le da energía a un material de forma constante, su temperatura sube y cambia de estado: primero pasa de sólido a líquido, luego a gas. Si se sigue agregando energía, los átomos se separan aún más y se forman partículas con carga eléctrica, como electrones (negativos) e iones (positivos). Esta mezcla se llama plasma, y se considera el cuarto estado de la materia.
Al agregar energía, la materia cambia de estado: sólido → líquido → gas → plasma
Posee propiedades únicas que lo hacen útil en múltiples campos de la ciencia y la tecnología. Su capacidad para conducir electricidad, generar campos electromagnéticos y modificar superficies lo convierte en una herramienta valiosa en áreas como la electrónica, la medicina, la energía y la industria aeroespacial. La tecnología del plasma sigue expandiendo sus aplicaciones, impulsando innovaciones en numerosos sectores.

¿Cómo funciona la tecnología de cirugía de plasma?

Ablación

Con un sistema quirúrgico de plasma de radiofrecuencia, la radiofrecuencia fluye a través de un electrodo activo y un electrodo de retorno, mientras que una solución salina conductora genera una vaina de plasma enfocada con precisión alrededor de los electrodos. Las partículas cargadas masivas dentro de la cubierta de plasma crean suficiente energía para romper los enlaces moleculares orgánicos dentro del tejido, disolviéndolo en moléculas y átomos a una temperatura relativamente baja de 40-70°.

Esto significa que puede extirpar el tejido rápidamente y con un daño mínimo a las células sanas circundantes.

Coagulación

Cuando la radiofrecuencia actúa sobre los tejidos (incluida la sangre), genera una reacción que provoca la coagulación y la hemostasia, preservando la mucosa y el tejido fibroso y la vitalidad de cada célula. Los pacientes experimentan una recuperación postoperatoria más rápida y cómoda con la ablación con plasma durante la cirugía, en comparación con los métodos más tradicionales.

El modo de coagulación ajustable puede mejorar la hemostasia, al tiempo que le brinda un campo de visión claro durante la operación.

Control de temperatura

El proceso quirúrgico por tecnología de plasma se realiza a una temperatura controlada de 40-70°. Como la radiofrecuencia se conduce a la solución salina para crear la cubierta de plasma en lugar de a los propios tejidos, el daño por calor con estos sistemas es mínimo. Usando una tecnología especial de control de temperatura, el sistema se mantiene a la temperatura ideal para una producción estable y efectiva.

Temperatura en plasma

Otras características clave

  • Protección automática: el dispositivo monitorea constantemente y suspenderá automáticamente su salida de energía si el electrodo se contrae o está demasiado cerca del metal, por ejemplo. Una vez que el electrodo esté en la posición correcta, se reanudará la salida de energía.
  • Sistema de control inteligente: identifique automáticamente los electrodos, el interruptor de pie y la fuente de alimentación.
  • Tecnología bipolar y multipolar: varios diseños de electrodos bipolares y multipolares están disponibles para la resección, ablación, coagulación y hemostasia rápidas de los tejidos blandos.
  • Función integrada: el electrodo versátil de un solo uso tiene un modo ALBATE para resección y ablación, y un modo COAG para coagulación, hemostasia, irrigación y succión. Simplemente cambie entre los dos modos usando un interruptor de pie codificado por colores.

Los beneficios de la tecnología de plasma en cirugía

La tecnología utilizada por nuestros sistemas quirúrgicos de plasma tiene muchos beneficios tanto para los pacientes como para los profesionales médicos.

  • Menos pérdida de sangre
    (por ejemplo, la pérdida de sangre de una amigdalectomía con tecnología de plasma se puede controlar por debajo de 2 ml, mientras que se pueden perder 100 ml de sangre con métodos quirúrgicos tradicionales)
  • Método quirúrgico avanzado: use un electrodo para llevar a cabo una serie de funciones
  • Seguridad
  • Rápida recuperación postoperatoria
  • Reducción del dolor del paciente
  • Estancias hospitalarias más cortas
  • Ahorro financiero